Sunday, November 30, 2008

de cifras y conceptos

En estos días obligatoriamente caseros he retomado pequeños hábitos que el devenir de la vida cotidiana había apartado de mí por un tiempo. Hábitos como cocinar a fuego lento bizcochos en tardes aburridas. Leer durante toda una mañana sin importar horas, ni quehaceres. Escuchar las noticias en la radio.

En estos días maravillosamente caseros me he levantado, sin proponérmelo, a esas horas en las que las calles todavía no están puestas, esas horas tranquilas en que parece que es más sencillo pensar y estar en calma. Esta mañana, bien tempranito, a través de las ondas me llegaba un dato: el 19% de los españoles sufre pobreza relativa. La llaman relativa porque existen otras mucho más aterradoras, la pobreza extrema, por ejemplo. Leyendo un poco acerca del tema, encuentro que existen muchos parámetros y determinantes para cuantificar y clasificar la pobreza. Ésta puede ser Rural o Urbana, Absoluta o Relativa...

El caso es que uno de cada cinco españoles sobrevive con menos de 530 € al mes. 530 euros. Hago cálculos y no me salen. Comparto piso en Madrid con otras 4 personas (ergo somos 5 en total) y, no por ello sale la cosa especialmente económica. La que aquí escribe desembolsa mensualmente un poco menos de los 400 euros por el alquiler, a los que hay que sumar gastos, compras... A lo que íbamos, el 19 % de los españoles no puede ir al cine nunca, no puede comer carne ni pescado cada dos días y no pueden tener calefacción en casa. La noticia concluía que la mayoría de los componentes de tal cifra eran personas mayores de 65 años que vivían solas.

En estos días dolorosamente caseros, cada mínimo y mundano movimiento de mi cuerpo ha sido un gran triunfo -no he parado de acordarme de la frase Es un pequeño paso para el hombre pero un gran paso para la humanidad- En estos momentos, una se siente vulnerable y humilde, humilde cuando una, desesperada, ha de rendirse a la evidencia de que alguien le va a tener que ayudar a ponerse los calcetines y atarse los zapatos. Cuando una está impedida de su libertad física, un gesto tan sencillo como cambiarse las bragas puede convertirse en una auténtica proeza que, una vez alcanzada, llena de satisfacción a su protagonista. Cada pequeña acción cotidiana se llena de sentido.

En estos días de retiro, casero, he pensado que es en momentos así ,tan frágiles, de enfermedad, física o espiritual, o de necesidad económica cuando los seres humanos se revelan más que nunca como seres sociales, que requieren ser parte de un grupo, una manada, una familia, sea ésta carnal o postiza.

Wednesday, November 26, 2008

de cosas que tenía escritas y hallé hace un par de días


Julio 2007 Pantano del Atazar

A veces se me va la cabeza a otros lados. Intento pensarlo todo y no puedo, me doy cuenta de la pequeñez de mi ser en tan vasto mundo. Yo estoy aquí, yo soy aquí. ¿dónde estarán los demás? También aquí, conmigo, porque los pienso, y el pensar es crear. El hablar es contrastar. El escuchar es aprender.

Anoche estuve en Birmania con James y con Vere por un breve lapso de tiempo , el que dura un rayo en una tormenta. Nos vi a los tres. James tumbado en el camino que llevaba a la parte trasera de la casa, con su cabeza sobre sus manos, tumbado boca arriba, silencioso bajo la lluvia. Vere, de pie, sin poder parar de hablar, como siempre, explicando sus teorías acerca de la maravillosa belleza de las tormentas eléctricas. Yo, no tengo recuerdo de mi misma. Sé que estuve allí, pues lo recuerdo. Sé que estuve allí, pues lo estoy narrando. Fue mi primera tormenta eléctrica, la segunda, quizás. Los rayos rosas iluminaban cada pocos segundos la intensidad del cielo birmano. Y el lago. El gran lago con la pagoda en el centro, aquel templo donde me acogieron y dieron de comer unos monjes con los que no había más forma de comunicarse que con gestos y con la mirada. La sensación era extraña, una mezcla de miedo y excitación infantil, sorpresa ante tanta belleza.

Ahora estoy frente a un pantano. El paisaje, a pesar de su esplendor, varía del de mi recuerdo; sobre todo, el paisaje humano, aquel por el que estoy más profundamente interesada. El calor podría equipararse, aunque salgo beneficiada en estos momentos. Los sonidos, también. Allá vivía en una maravillosa casa de teka, acá estoy en una tienda de campaña de prestado. Todo es similar y sin embargo, esto carece del halo de la aventura.

Tuesday, November 18, 2008

Tuesday, November 11, 2008

fue verano hace tan solo unas horas

¿Soy solo yo o fue verano otra vez la semana pasada? Tengo la sensación de haber pasado unas vacaciones en mitad de esta mi rutina madrileña, vacaciones que vinieron de la mano de un austaliano alto, rubio y con un increible aspecto de fragilidad enlatado en un cuerpo de casi dos metros de alto.

El verano pasó y me arrebató de nuevo, como hacía tiempo que nada ni nadie lo hacía. Todo alrededor estaba borroso.

Una semana de viaje en mi propia casa, en mi propia ciudad. Haciendo todas esas cosas con las que una disfruta sin pensar en mañana, luego, más tarde. Viviendo la intensidad que sólo puede dar el conocimiento de que lo que una está viviendo es finito, tiene una fecha clara de caducidad. Siendo honesta con una misma 100% y no dejando en el tintero cosas ni midiendo las palabras por el que dirá, el que pensará.

Otra vez, una historia platónica, no sellada con besos apasionados ni contactos íntimos. Al menos, no íntimos en el sentido convencional del término. ¿No es acaso íntima una caricia en la pierna, un apretón de manos, un abrazo de los que duran una eternidad?

Un historia de las que cuando acaban la dejan a una descolocada, como cuando se regresa de un viaje de los que te llegan, como cuando te despiertas de un sueño perturbador.

Una maravillosa historia imposible.

Wednesday, November 05, 2008

del poder del i-ching y las mutaciones de la vida

"I believe I can see the Future
'cause I repeat the same routine¨
Nine Inch Nails, Every Day is Exactly the Same


Cuando el otro día, Vero se afanaba en echarse el I-Ching en busca de respuestas a sus millones de preguntas, Yo, desde una esquina, miraba de reojo con incredulidad; siempre he sido un poco incrédula para los menesteres de las predicciones y demás asuntos clarividentes. Cuando, más tarde, Vero me propuso echármelo a mí, para ver qué tal iba a darse una cena que ibamos a celebrar en casa esta semana; Yo no alcanzaba a entender el significado de las respuestas del Libro de las Mutaciones a nuestras plegarias.

El primer hexagrama era El Alimento. La primera en la frente. No sé quién le había contado al I-Ching lo de la cena pero desde luego se había enterado. Por lo que se ve estos chinos, allá por el Pleistoceno, ya reparaban y daban importancia a tales eventos. El segundo hexagrama era La Retirada. Huida, Rendición, Aislamiento. Estas pistas tendrían que haberme bastado para darme una pista, pero, lo cierto, es que en el momento no lograba entender una m. de lo que el libro me gritaba a los cuatro vientos.

Y lo que me gritaba es que el Sr. Wilson, cocinero consorte del evento iba a llamar para cancelar la cita culinaria.

La interpretación de Confucio al respecto es "Libertad para vivir en soledad. Retirarse es lo que exigen los tiempos, y nada podrá impedírnoslo. En nuestro interior, deben reinar la firmeza y la claridad para saber en qué momento debemos ponernos de nuevo en movimiento"

Habrá que escucharle.

Saturday, November 01, 2008

farewell my friends

"Strength is just an accident arising from the weakness of others"
Joseph Conrad, Heart of Darkness

"Hemos decidido tener hijos y, por eso, hemos vendido todo, dejado el trabajo, alquilado nuestro hogar, comprado un 4x4 y vamos a África hasta que nos dure el dinero. Después, sólo después, los tendremos". Tras tal declaración llegó una enumeración increíble de países. Marruecos, Mali, Mauritania, Burkina Faso... tantos que mareaban. Imposible imaginar las mil y una aventuras a las que se van a enfrentar estos dos intrépidos. Sólos. Hombre, mujer y un coche. Por delante un inmenso continente: África. Con mayúsculas.

Al otro lado de la mesa, el que se queda en tierra babea con los ojos cristalinos llenos de luz envidiosa y, con una verborrea incesante y enigmática, "La turbina debería ser bipolar, El cigüeñal es muy difícil arreglarlo..." va hilando consejos indescifrables para estos oídos poco duchos en los menesteres de la mecánica.

En estos tiempos que corren aplaudo inciativas atrevidas y coherentes con lo que uno piensa, siente y es. Buena suerte a los intrépidos.