Me encanta la sensación de sentarme a escribir, en el estudio, soleado, orientado al sur, la sensación de sentarme a escribir sin nada sobre lo cual hacerlo. Sin dirección, sin meta, sin mapas. Escritura automática, creo que la llaman. Todo lo que no se debe hacer cuando una quiere escribir "de verdad" (whatever that means).
Hace meses que no pienso en versos, hace meses que no entreno mis sentimientos para que encajen en 5-7-5. Hace meses que tampoco narro, ni describo lo que veo y vivo. Hace meses que estoy hablando demasiado y las palabras se me escapan por la boca en vez de destilarse a través de la piel hasta el final de mis dedos para pulsar suavemente cada una de las teclas necesarias para dibujar mis pensamientos.
El Sr. Wilson dice que ya no soy Zen y me he arrojado a la mala vida. Quizás sea eso.
Echo de menos los golpes de historias en mi cabeza.
El Sr. Wilson dice que ya no soy Zen y me he arrojado a la mala vida. Quizás sea eso.
Echo de menos los golpes de historias en mi cabeza.
2 comments:
¿Empantanada? Los pantanos se secan a golpes de sol y las ranas quedan desnudas y boquiabiertas a la espera de que pase alguien que les cuente algo (cómo atardece en Lavapiés, el olor de la vigilia de los seguratas noctornos, la contravida que nos lleva hacia el bien o el mal...). Ánimo. Las ranas ya comienzan a sentir calor en el cogote.
Fritanga
Los atardeceres en Lavapiés serán muy coloridos este fin de semana que se celebra un festival de Bollywood. Samosas a un euro a tutiplen!
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