I can’t say that the thing actually belonged in the place where it ended up. In fact, none of the things there really belonged. They all seemed happy enough though, so maybe that didn’t matter.
Finalmente, le encontré el sentido. Allí estaban todos aquellos eucaliptos, imponentes a pleno sol en medio de la inmensa pradera amarilla, recortados contra el fastuoso cielo azul. Por un momento, creí estar en África. Podría haber estado en África. Pero no, estaba en Willunga Hill a tan sólo una hora al sur de Adelaide, la quinta ciudad más poblada de este vasto país, de este indómito continente.
Apenas una semana ha pasado desde que aterricé en el aeropuerto de la ciudad, situado un poco más al oeste, y, sin embargo, parece un mes, already. Quizás es que yo, como los eucaliptos o las cosas perdidas, haya por fin encontrado mi sitio. En Galicia, los eucaliptos parecen extraños, dañinos, foráneos. Y, sin embargo, en su lugar son tan bellos, tan apacibles, tan mágicos. Sólo se trata de eso, encontrar tu hueco, tu sitio, sea éste conscientemente permanente o maravillosamente transitorio, pero, tuyo, de nadie más.
#TDU #69 #luckynumber #adelaide #OZ #learningtofly #lovingit #travellingauntiemoni #latiamoni #adoroaZOE
Qué bonito Mónica! esas sensaciones son preciosas! ese momento que sientes que llevas toda tu vida en ese sitio y simplemente sabes que es tu sitio!! wauu me encanta! sigue escribiendo! :)
ReplyDeletebss
Tania
Gracias Bella! Lo seguire haciendo
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