El metro suena a tambores de guerra africanos, al ritmo de manos negras, los madrileños, de chaqueta y muy serios, corren por los pasillos subterráneos de un lado a otro de la ciudad.
Las pinturas de guerra y los ropajes son distintos aquí que en la sabana pero cumplen la misma función. Me descubro rebotando sobre mis pies mientras yo también corro por la ciudad subterránea. Corro al ritmo de su frenesí africano, quién sabe qué significarán esos redobles...
Si que es cierto, el metro de madrid tiene algo de africano. Ya no es solo por la prisa o los tambores sino por la estructura. Por ejemplo yo no puedo sacar fotos en el de Bilbao y me resulta algo menos dificil en el de Barcelona. Pero el de Madrid tiene algo especial que tiene que ver con el caos.
ReplyDeleteEstéticamente hablando me gusta el de madrid, por su caos (me da igual que haya gente o no); el de paris por su belleza, (sobre todo algunas estaciones, que no voy a descubrir, nadie dice sus secretos) y el de roma es una mierdecilla pero tiene un tren entero totalmente grafiteao por fuera, supongo que ya lo habrán arreglado y se lo habrán cargado.
Luego es fundamental la manera de sentarse de la gente si las sillas están en la pared las miradas son obligatorias; si están como en el bus; ves el cogote del o de la que está delante lo cual impide el mirarse a los ojos.
un saludo.
p.d. no te dije de mi blog, porque no estoy seguro de borrarlo. lo dejo una semanita más, haber que pasa.
No lo borres!
ReplyDeleteEres un maestro de los metros...Yo aqui me referia literalmente a los tambores de gente tocando.
¿ qué seria de la vida sin la homofonía ?
ReplyDeleteel ser se dice de muchas maneras.
jie jie
besitos